lunes, 27 de abril de 2015

Primeros Auxilios en deporte para dummies

En un soleado domingo por la mañana, los espectadores que se han acercado al campo de hockey están disfrutando en un intenso partido. En un momento todas las miradas se centran en el jugador que ha recibido la bola en el área contraria con mucho peligro. Un defensa llega para frenarle, empieza un bonito uno contra uno y... de repente el árbitro para el tiempo. Desconcertado, el jugador que tenía la bola levanta la cabeza, ¿qué ha pasado? Enseguida las miradas cambian de dirección hacia la esquina opuesta del campo...

Un jugador que se ha desplomado y está tendido en el suelo.


Varios compañeros se acercan rápidamente. Le llaman por su nombre pero no hay reacción. Llega también el árbitro, los entrenadores... "¡Qué alguien llame a un ambulancia!"

¿y qué hacemos hasta que llegue el ambulancia?
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La importancia crítica de saber qué hacer

Por suerte, una situación como esta no es frecuente. Pero aun con escasa incidencia, que alguna de las personas que la presencia conozca qué hay que hacer va a suponer un todo o nada: cuando se produce una parada cardiorrespiratoria (PCR), si no se hace nada, a los 4 minutos ya se produce muerte de células cerebrales, y a los 10 la muerte total. Entre que la gente se acerca, nos damos cuenta de qué ha pasado y alguien reacciona y llama a los servicios de emergencia, ¿cúantos minutos pueden haber pasado ya?

¿Y hasta que llegan?


Es por esto que en la liga de fútbol profesional, por ejemplo, una ambulancia con personal especializado se encuentra a pie de campo. Pero, por desgracia, no es ésta la realidad de los campos de hockey, donde a falta de personal de emergencias tendremos suerte si del gremio sanitario hay un fisioterapeuta si es el partido que es de la categoría de División de Honor. Y sería además algo cuestionable saber si este fisio, como sanitario, está al tanto de Primeros Auxilios. Tampoco es la realidad de tantos otros deportes minoritarios o ligas infantiles o amateurs, ni tampoco la realidad que puede ocurrirte un día andando por la calle, estando en el trabajo o dando un paseo por la montaña.

Entonces, si ésto ocurre durante un partido:

¿Quién sabe primeros auxilios en el campo de hockey ?


Por ello hoy los ojos bien abiertos con esta entrada. Los Primeros Auxilios más que una optativa en las carreras sanitarias debería ser una materia troncal de instituto, como lo es por ejemplo en países como Estados Unidos. Curiosamente, en este país la Asociación Americana del Corazón se puso como objetivo propagar estos conocimientos entre toda la población, mientras que en nuestro continente el Consejo Europeo de Resucitación sólo contempla el sector sanitario. Y la realidad es que, a veces, no llegan ni hasta ahí.

Hoy en esta entrada, y aunque lo ideal sería que todo ciudadano hiciera formación básica en Primeros Auxilios, vamos a sintetizar la información útil y práctica sobre lo que necesitáis saber si presenciáis una situación de PCR, para saber qué es lo que tenéis que hacer hasta que llegue la ambulancia.



Houston, tenemos una Parada Cardiorrespiratoria

Lo que tenemos que hacer ante una PCR se resumen en cuatro pasos que, unidos, forman lo que se llama la Cadena de Supervivencia:



1. RECONOCIMIENTO Y PEDIR AYUDA:

Reconocer la PCR: 

Como en la vida misma, lo primero para reaccionar ante una situación es reconocerla. Si una persona se desploma no siempre tiene por qué ser una PCR. Lo primero tenemos que ver es si está consciente, llamarle por su nombre, pedir algún tipo de reacción. Si verdaderamente la persona está inconsciente tenemos que ver si respira (antes se miraba también el pulso, pero actualmente no se hace porque a las personas no sanitarias les resultaba difícil buscarlo y, además, incluso en sanitarios esta evaluación daba muchos falsos positivos, que significa no encontrar el pulso cuando si que lo hay).

Para esto haremos la maniobra frente-mentón para facilitar la apertura de la vía aerea. Consiste en extender hacia atrás la cabeza, con una mano en su barbilla y otra en su frente, ya que si la cabeza estuviera girada o flexionada la vía aérea estaría comprometida. Nos fijaremos en: verla, cómo el pecho se mueve al coger y echar aire; oírla, aproximando nuestro oído a su boca; e incluso sentir la salida del aire sobre nuestra mejilla.


1. Vía aérea comprometida por la posición 2. La abrimos extendiendo la cabeza 3. Y comprobamos si respira


En caso de duda la decisión es clara: no respira. Si el jugador esté haciendo boqueadas agónicas (lo que se conoce como gasping) se considera como no respiración, al ser un signo de parada cardiaca.


Ok, el jugador está insconsciente y no respira. Reconocida la PCR, haremos inmediatamente tres cosas:

1.1 Proteger el perímetro. En un campo de hockey no será necesario, pero si la situación se produce por ejemplo en la carretera, antes de ir a ver cómo está la persona, antes absolutamente de nada, lo que debemos hacer es asegurarnos de que no ocurren más accidentes y de que no nos ponemos en peligro.

2.1 Pedir a alguien que llame al 112. ¡Evidente! Pero en tal situación, con el nerviosismo, no se debe olvidar. Ocurre a veces en personas entrenadas que al reconocer la situación comienzan las maniobras de resucitación sin haber llamado. Pediremos a alguien que lo haga mientras comenzamos.

3.1 Y entonces, ya si, socorrer. Hemos chequeado la consciencia, no hay tampoco respiración. Pedimos a alguien que avise a la ambulancia y pasamos al punto 2. 




2. MANIOBRAS DE RESUCITACIÓN CARDIOPULMONAR (RCP)


Los servicios de emergencia están viniendo. Hasta que lleguen tenemos que hacer del corazón que se ha parado para mantener al jugador con vida. Para ello vamos a hacer dos cosas: compresiones en su tórax y ventilaciones en su boca.


Compresiones: 

Las compresiones torácicas generan un pequeño pero crítico flujo de sangre al cerebro. Para ello apoyaremos el talón de nuestra mano sobre la parte baja del esternón, pondremos el otro talón por encima y entrecruzaremos los dedos de ambas manos. Mantendremos los codos estirados generando la fuerza con nuestro tronco. Las guías indican que debemos comprimir a una velocidad aproximada de 100 veces/minuto y con una profundidad de 5 a 6 cm (1), permitiendo que el pecho se expanda completamente después de cada compresión, por lo que debemos tomar el mismo tiempo en la compresión que en la relajación.

Compresiones: talones de las manos superpuestos sobre el esternón

Ventilaciones: 

Con las manos en la misma posición que en la maniobra de frente-mentón, y aprovechando los dedos de la mano de arriba para cerrar la nariz, sellaremos su boca con la nuestra e insuflaremos aire. No debemos hacer una hiperventilación ya que produce un exceso de presión en el tórax reduciendo el retorno venoso al corazón.

Ventilaciones: maniobra frente-mentón cerrando la nariz



 Compresiones y Ventilaciones se combinan al ritmo de:
 30:2

30 compresiones - 2 ventilaciones

Y así haremos hasta que:
  • Llegue el ambulancia
  • Despierte
  • Quedemos exhaustos (estas maniobras son muy cansadas y pueden ser agotadoras si tenemos que estar un tiempo largo, por eso se recomienda turnarse entre dos personas)

IMPORTANTE

Si no estamos lo suficientemente preparados para saber hacer las ventilaciones o para hacerlas volviendo a comprimir rápidamente porque no estamos entrenados, no importa: no las haremos. La investigación indica que la RCP sólo con compresiones puede ser tan efectiva como combinada con ventilaciones en los primeros minutos. Y desde luego, que hacer sólo compresiones es mejor que no hacer nada (1).

Así que, en caso de duda, quedaros con una premisa: sólo comprimiremos.
 Reconocer la parada, avisar, comprimir, comprimir, comprimir...




3. DESFIBRILACIÓN

Si hacemos los apartados 1 y 2, ya hemos hecho lo que debíamos. Quedaros bien con ellos y, si no queréis, no es necesario que sigáis leyendo. 

Pero por redactar esta entrada completa y para los que estéis formados previamente continuaremos explicando la cadena de supervivencia con el paso 3: el desfibrilador o DESA (desfibrilador semiautomático y modelo más frecuente). El desfibrilador es ese aparatito que veréis indicado en centros comerciales, aeropuertos y también en todas las instalaciones de hockey encuadrado en algún lugar entre los campos y el vestuario y que nadie sabe manejar. Sin embargo, su funcionamiento es extremadamente simple y su uso en los 3 a 5 primeros minutos tras el paro pueden conseguir unas tasas de supervivencia muy altas: del 49%-75% (1).

Antonio, el último que aprendió cómo se manejaba el DESA

En el caso de utilizarlo, lo solicitaremos en el punto 2.1: cuando reconozcamos la PCR, a la vez que encargamos a alguien que llame al 112, mandaremos a otra persona que nos traiga el DESA que haya en el campo. Iniciaremos las maniobras con normalidad y cuando llegue las interrumpiremos para colocarlo rápidamente: pegaremos los parches sobre el tórax del paciente (uno por debajo de la clavícula derecha, otro en la cara lateral de la parrilla costal izquierda) y encenderemos el aparato. Aquí reiniciamos las compresiones y el DESA nos va diciendo lo que tenemos que hacer a través de instrucciones sonoras.

Colocación de los parches del DESA

Seguiremos con las maniobras de compresión y ventilación normales excepto cuando el DESA nos indique dos órdenes:

- "Analizando ritmo": el aparato está evaluando si el ritmo del corazón es desfibrilabre, es decir, si aplicando una descarga puede volver a su ritmo normal. Así que no podemos estar bombeando por él. Al acabar el análisis nos contestará dos cosas: "ritmo no desfibrilable", seguiremos entonces comprimiendo; "ritmo desfibrilable, preparando descarga", en el que igualmente seguiremos comprimiendo hasta que diga...

- "Descarga preparada": en esta instrucción dejaremos de tocar al jugador para que la corriente no nos llegue también a nosotros y presionando el botón se aplicará la descarga. Inmediatamente después retomaremos las compresiones hasta que nos vuelva a dar otra orden.

Y así combinaremos las compresiones/ventilaciones con las descargas del DESA. Realmente muy sencillo si el reanimador ha pasado por... ¿diez minutos de aprendizaje con el aparato? Que serían muy importantes en caso de producirse una situación así.



4. CUIDADOS POSTRRESUCITACIÓN:


Si logramos que el jugador recupere la consciencia y los médicos de emergencia no han llegado al campo, no haremos que el jugador se ponga de pie ni nada parecido, sino que lo mantendremos tumbado colocándolo en Posición Lateral de Seguridad.

Para ello separaremos el brazo más cercano a nosotros, doblaremos su rodilla contraria y lo giramos hasta ponerlo de lado con su mano de arriba debajo de la cara. Esta posición mantiene la vía aérea abierta y evita que sea bloqueada en caso de vómitos.



¡Bravo! Lo hemos conseguido. Nos quedaremos entonces a su lado vigilando el estado de consciencia hasta que llegue la ambulancia. Pero no olvidéis que si no logramos reanimarle no querrá decir que no hayamos logrado nada ni sido eficaces. Al contrario, podremos haberle mantenido con vida los minutos suficientes hasta que lleguen los médicos y nuestra función habrá sido igual de importante.


Conclusiones

Fisioterapeutas, ¿qué curso me recomendaríais ahora que voy a trabajar en fisioterapia deportiva? Pues en caso de que no sea en fútbol de 1ª división, el de una técnica que, con suerte, no vas a usar nunca o contadas veces. Lo que prometemos es que aunque la uses una sóla vez durante toda tu carrera los resultados serán increíbles: mantener la vida de un jugador, aunque le duela un poco la muñeca o tenga cargado un cuádriceps. Se llama Resucitación Cardio Pulmonar. Localicemos también el DESA que hay en el campo y chequeemos que está en buen estado y está preparado. Y promovamos entre nuestros jugadores y compañeros del cuerpo técnico la formación en estos conocimientos.

Jugadores y entrenadores, ya que estamos incluidos en el ambiente deportivo y también en nuestra vida cotidiana podemos encontrarnos en una situación de emergencia en la carretera, en la montaña o en el parque, seguro que formarnos en estas técnicas será un tiempo bien aprovechado. Que no aprendiéramos estos conocimientos, como tantos otros, dentro de nuestra educación básica no quiere decir que, como en América, no estén dentro de los básicos. Cruz roja es un buen sitio para esto (3). Además, como otras actividades o charlas que damos a nuestros jugadores en el club sobre alimentación o dopaje, ésta debería ser una de ellas. Nos puede evitar una tragedia si se produjera una ocasión.

Y para todos, toda esta entrada se resume en una sóla idea que es la que debemos de aprender y grabar:

Si presenciamos una PCR debemos llamar al 112 y empezar a hacer compresiones torácicas hasta que lleguen. Sin parar. Eso ya será mucho.



1. Guías para la Resucitación del Consejo Europeo de Resucitación (ECR) 2010 https://www.erc.edu/index.php/doclibrary/en/230/1/
2. Guías para la Resucitación de la American Heart Asociation (AHA) 2010  http://circ.ahajournals.org/content/122/18_suppl_3/S640.full.pdf+html
Estas guías se revisan cada 5 años, así que la próxima se publicará en 2015 con nuevas modificaciones. Pero eh, sería una pena que a alguien le hiciera falta esta información antes y no la hubiera leído por estar esperando a la nueva.
3. Cruz Roja Española  http://www.cruzroja.es/cre_web/formacion/primeros_auxilios/ppaabasicos.html

1 comentario:

  1. ¡Hola a todos, enhorabuena por el blog! Me gustaría invitarte al I Congreso Internacional online de Fisioterapia del Deporte y Juegos Olímpicos. Una ocasión única y privilegiada para estar al día de este mundo. Como profesional del ámbito creo que puede resultarte muy enriquecedor. Cuentan con la colaboración de los fisioterapeutas más renombrados del mundo del deporte y a través de sus ponencias y entrevistas, conocerás todo y más sobre ellos. Solo tienes que registrarte a través de la web http://olimpiadas.iaces.es
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